Hoy por hoy los equipos de Escritorio/Laptops NO deberían de ser lentos en sus prestaciones… mas si embargo .aun los hay…Entre las molestias y el tiempo que se pierde, un equipo lento representa un serio obstáculo para trabajar con eficacia. Antes de adquirir un sistema completamente nuevo, puede optar por aumentar la velocidad del que ya dispone.
Aumente la RAM. El método más seguro para aumentar la velocidad del equipo es ampliar su RAM. Un equipo portátil puede actualizarse sólo hasta un determinado límite, pero si trabaja con un equipo de escritorio, el único límite es el presupuesto. Puede instalar una nueva RAM por sí mismo, pero es mejor que alguien le ayude la primera vez que lo haga. Procure llegar al menos a 2 GB, aunque lo idóneo para un rendimiento óptimo es 4 GB.
Elimine el software espía. Si no ha analizado el equipo en busca de virus y software espía de forma habitual, hágalo ahora. Aunque no dañe los datos ni ponga en peligro sus contraseñas, un código malintencionado consume recursos del sistema y ralentiza todo lo demás…
Cierre algunos programas. Aunque no esté utilizando una aplicación de forma activa, cada ventana abierta utiliza parte de la memoria, al igual que cada ficha del explorador de Internet. Si cambia sus hábitos de trabajo para reducir la sobrecarga del sistema, la capacidad de respuesta mejorará inmediatamente.
Desactive los efectos visuales. Puede acelerar Windows 7 apagando los efectos visuales avanzados. Escriba “Información y herramientas de rendimiento ” en el cuadro Inicio y haga clic en “Ajustar efectos visuales”.
Desactive el inicio automático. Permitir el inicio automático de los programas significa empezar el día con más retraso y contar con menos recursos para las tareas realmente importantes.
Utilice ScanDisk y Defrag. A veces nuestros equipos sólo necesitan que se eliminen algunos de los archivos innecesarios. Las utilidades ScanDisk y Defrag buscan errores y reorganizan archivos en un orden más lógico y eficiente. Dado que mientras se ejecutan estas utilidades no es posible realizar ninguna otra acción, aproveche el tiempo de la comida o las reuniones largas para ejecutarlas.
Limpie el disco duro. Deshágase de lo que no necesite. Las cookies y los archivos temporales son los candidatos más evidentes, pero busque también archivos antiguos que puedan eliminarse o aplicaciones que ya no use. Si el disco duro está casi lleno, considere la posibilidad de comprar un disco duro externo para almacenar archivos importantes a los que normalmente no accede.
Aumente la memoria virtual. Cuando un equipo se queda sin memoria RAM utiliza una parte del disco duro como memoria virtual, pero no usará más de lo que usted le permita. Aumente la memoria virtual, también llamada tamaño del archivo de paginación, para que su equipo tenga una mejor capacidad de respuesta.
Cree una unidad de RAM USB. Si tiene un equipo antiguo, puede convertir una unidad USB vacía en una unidad de RAM extra mediante el menú de la memoria virtual. Esto tiene un mayor efecto en los equipos con menos de 2 GB de RAM.
Adquiera un disco duro de estado sólido. Las unidades de estado sólido no necesitan girar para que el equipo pueda recuperar la información, por lo que son más silenciosas y considerablemente más eficientes desde el punto de vista energético que las unidades de disco duro tradicionales. Si utiliza varias unidades, coloque el sistema operativo en la unidad de estado sólido, puesto que es a lo que el equipo accede con mayor frecuencia.