viernes, 11 de enero de 2013

Un niño de 13 años tira del freno de emergencia de un tren trascaérsele su iPhone por la ventana

Spencer Todd es un niño de 13 años de la ciudad de Dunedin, Nueva Zeland, que el pasado 7 de enero tiró del freno de emergencia del tren turístico en el que viajaba tras caérsele su preciado iPhone por la ventana mientras sacaba unas fotos del paisaje. iPhone, ventana, freno de emergencia… ¿Quién a su edad no hubiese hecho lo mismo?

Esta es otra de esas historias de las muchas que os contamos en iPadSfera, que aunque parecen de risa, son tan reales como la vida misma. El suceso tuvo lugar mientras el joven viajaba en el tren turístico Taieri Gorge Railway. Era tan bonito el paisaje por el que pasaba aquel tren, que el niño de 13 años sacó su iPhone por la ventana para tomar algunas fotos del mismo, pero de repente…. ¡ZAS! Una ráfaga de viento se lo quitó de las manos, llevándose su iPhone ladera abajo mientras el tren seguía su camino.

Sin pensarselo dos veces, el pequeño Spencer salió disparado hacia la palanca del freno de emergencia del tren, ya que esa era la unica forma que se le pasó por su cabeza para poder recuperar su dispositivo. ¡Había que pararlo como fuese! Para eso estan los frenos, ¿no?.


Cuando el tren paró a 700 metros del lugar en el que se le había caído el iPhone, el niño fue hasta allí acompanado de una azafata para poder recuperarlo, aunque sin ningún éxito, ya que ninguno de los dos pudo encontrar su tan preciado smartphone. Sin embargo, la suerte quiso que en el viaje de vuelta el tren volviese a parar en aquel lugar, y tras varias ojeadas por la zona, un azafato lo encontrase.

Según las palabras de Spencer:

Tiré de esa cosa que sólo se puede utilizar en casos de emergencia, y este realmente lo era. Mi iPhone es muy importante para mí.

Como veréis, esto no es algo que se vea todos los días. Seguro que la mayoría de los pasajeros hubiesen reaccionado de otra manera muy diferente si se les hubiese caído su dispositivo por la ventana. Pero cuando juntamos la palabra “iPhone” con “niño de 13 años“… ¡nadie sabe lo que puede suceder!. Menos mal que al final ninguno de los pasajeros salió herido tras el brusco frenazo. ¡Y al final el pequeño Spencer pudo volverse contento a su casa!.